Sacra Conversación

Sacra Conversación

Los desposorios místicos de Santa Margarita, de Parmigianino

Montañez Arroyo, Mario Virgilio, Sacra Conversación. Los desposorios místicos de Santa Margarita, de Parmigianino. ed. Ayuntamiento de Málaga. Área de Cultura y Museo del Patrimonio Municipal, Málaga, 2022 

Esta exposición tiene como protagonista una pintura, Desposorios místicos de Santa Margarita, atribuida al pintor renacentista italiano Francesco Mazzola, Il Parmigianino, al que recientes investigaciones dotan de poderosos argumentos para verificar su autoría. Claro exponente del estilo manierista del Renacimiento, caracterizado por la voluntad de los autores de, partiendo de una voluntad primera de imitar a Miguel Ángel, introducir su propio toque personal, su propia maniera. Seguramente sea ésta la obra más valiosa del patrimonio artístico de la ciudad, llegada en 1872 a través de la donación de la misma a la capilla del Hospital Noble por parte de William B. Newbery, socio en Boston de los Loring malagueños. Tal vez la confusión de la protagonista del cuadro, Santa Margarita de Antioquía con su homónima italiana santa Margarita de Cortona, fundadora de hospitales y protectora de pobres, sea la causa de que esta pieza terminara en Málaga tras haber sido rescatada del expolio realizado por Napoleón en Italia.

Para comprender mejor la pieza de Parmigianino, datada presumiblemente en 1529, debemos considerar primero su asunto, un desposorio místico, al que se dedica la primera sección de la muestra, presidida por el lienzo de Parmigianino y documentos que relatan su llegada a Málaga y el interés por el mismo iniciado por Juan Temboury. 

La segunda sección se ocupa de la iconografía de los personajes del Parmigianino a través de obras de los siglos XVI y XVII: San Petronio (aunque es más probable su identificación con San Agustín, presente con la única representación de época que la orden agustiniana consiguió preservar en la ciudad), la Virgen con el niño (retratados por el barroco flamenco van Oost y en documentos barrocos malagueños), Santa Margarita de Antioquía (representada en una talla de escuela alemana del siglo XVI), el arcángel San Miguel y San Jerónimo (en su condición de ermitaño en pintura y en una curiosa representación tridimensional del siglo XIX).

 Finalmente, el espacio final de la exposición se dedica a la pervivencia del manierismo en los últimos siglos. La audacia formal del manierismo, del que también encontramos otras notorias muestras de los siglos XVI y XVII, se extenderá más allá de su época, con lo que podremos rastrear su influencia en el arte malagueño desde finales del siglo XIX (Pedro Sáenz Sáenz), el siglo XX (Pablo Picasso, Manuel Mingorance Acién, José Aguilera) y el XXI (José Luis Puche, en este caso partiendo de un original miguelangesco).

Como expresión de la riqueza del patrimonio local, todas las piezas expuestas provienen de la propia ciudad de Málaga.